En los inmediatos de la posguerra los pintores y escultores de Roma acostumbraban bastante a menudo reunirse para charlar de Arte. Me contaba el amigo y colega Aurelio C. que en una de estas ágapes, no recuerdo si uno de los hermanos Basaldella (el pintor Afro y el escultor Mirko) o Corrado Cagli, argumentaba que el Estado tendría que pagar un sueldo
……. a todos aquellos que se consideraban a sí mismos como “artistas”, para que dejaran de aparentar ser pintores, molestando a aquellos que tenían razones más serias para pintar.
En realidad, yo recuerdo que a finales de los años ‘60 la palabra “Artista” era en cierto sentido todavía tabú, imponía respeto, tenía “espesor” y sólo los necios y presuntuosos podían tener el descaro de auto-considerase “artistas”.
Nuestro Maestro Goffredo Trovarelli en la Academia di Bellas Artes en Florencia nos recomendaba olvidar la palabra “arte” y “artista“, que a determinar qué y quién se podría definir como tal sería la historia a decidirlo (decía que “debe de pasarle encima a las obras por lo menos un siglo “). Según Trovarelli nosotros teníamos que luchar por ser Pintores, bueno Pintores, con el objetivo de “pintar bien” y dar un sentido profundo a nuestras investigaciones y creaciones, trabajando duro todos los días, independientemente de chismorreos, habladurías o atajos, con dignidad y practicando la virtud de la modestia…
“La Pintura no nos hace reír, a diferencia del teatro. Y, a diferencia de la música, ni siquiera llorar. Es más cónsona al pudor, a la discreción, a lo no dicho”, escribe Jean Clair, Director del Museo Picasso de Paris.
En aquel tiempo todavía se le daba un gran sentido a las habilidades, conocimientos y experiencias, para lo cual uno podía ser Pintor, Escultor, Arquitecto, Grabador, Ceramista, Mosaiquista, Diseñador Gráfico, Ilustrador, Fotógrafo etc. y esta calificación era más que suficiente para definir la profesión de la persona. Definirse a si mismos como “ARTISTA” era cosa de bufones.
Escribía Tina Modotti: “Siempre que se emplean las palabras «arte» o «artístico» en relación a mi trabajo fotográfico recibo una impresión desagradable, debida seguramente al mal uso y abuso que se hace de ellas. Me considero una fotógrafa y nada más”
Un buen Escultor, Fotografo o Pintor anciano, con muchas experiencias, conocimientos y habilidades profesionales reconocidos objetivamente podía ser considerado Maestro (por parte de los demás)… pero nada más o diferente.
Tal vez tuvimos la suerte de vivir el final de la época en la que las palabras tenían todavía un peso y un significado preciso y las personas estaban socialmente valorados por lo que realmente eran y no por las apariencias … no se trataba de aparentar, sino de ser.
En esos mismos años iniciaba tímidamente, casi clandestinamente, el fenómeno que hoy conocemos como “Arte Contemporáneo“… que luego se ha transformado en “SISTEMA” y que ha invadido el planeta entero…
…Y qué “casualidad” que en poco más de una década se han distorsionadas y negadas todas las características comunes y específicas de los lenguajes de las Artes Plásticas, sustituyéndolas todas por supuestas “CONCEPTOS”.
Ha sucedido como si de repente se negaran como “obsoletas” las palabras a la Poesía, los sonidos a la Música, la voz al Canto, el cuerpo al Baile… Y como si todas estas disciplinas de las Artes fueran reemplazados por “CONCEPTOS”……. y en lugar de Poetas, Músicos, Cantantes y Bailarines fueran todos llamados genéricamente “ARTISTAS” que expresaran sus “Conceptos” con cualquier estúpido y banal invento, mueca, ruido u objeto, quizás encontrado en algún basurero.
Y para apoyar a estos supuestos “Artistas de los Conceptos” en pocos años ha aparecido, como por arte de magia, todo un SISTEMA cerrado (desde el Schaulager de Basilea hasta Palazzo Grassi de Venecia), articulado y organizado en jerarquías (con críticos , curadores, gestores, financiadores, políticos, galerías, museos, etc.) que, a partir de una oligarquía financiera muy restringida, que comprende dos o tres galerías de París y Nueva York, dos o tres casas de subastas y dos o tres instituciones públicas responsable del Patrimonio de un Estado decide TODO a nivel mundial, en todos los rincones del planeta, con el consentimiento de todas las instituciones públicas y privadas del mundo… paralelamente y simulando los mismos métodos y objetivos fraudulentos, usureros y especulativos del sistema bancario internacional , hegemónico desde hace un par de décadas sobre los Gobiernos y Constituciones Nacionales de los países europeos.
… “El ejemplo más llamativo es el de Beuys, quien, a finales de los años sesenta, proclama:” Todo hombre es un artista. Todo lo que hacen es arte”…”Escupir en el aire es arte “: son muy conocidas estas declaraciones furiosas que marcan la triste decadencia de las artes contemporáneas. Pero no todo hombre es un bailarín, un músico, un cantante” dice Jean Clair, que continúa: “Curiosamente, el artista plástico es el que más que cualquier otro niega la enseñanza de una técnica y de un oficio, mientras que este tipo aprendizaje es fundamental en el cine, el vídeo, la televisión o la danza. Tomando el ejemplo de la música, incluso John Cage ha seguido una enseñanza tradicional, asistiendo a la Juilliard School de Nueva York”…
Y sigue Jean Clair: “Esta pseudo-demagogia generalizada proporcionará una extraordinaria oportunidad política para los gobernantes, que en nuestros días se ocupan con un gran interés de Arte Contemporáneo, en la medida en que este tipo de propaganda permite de valerse del arte y de aparentarse a espíritu ilustrado, y por lo tanto” moderno “, ahorrando el esfuerzo del aprendizaje y las inversiones que requeriría… en el nombre del totalitarismo de los imbéciles tipo Beuys”…
Hoy todos son ARTISTAS…
… En esta decadente relajación general, todo es provisional, efímero, vacío, fragmentado, confuso, artificial, falso…cuando el estatus de “ARTISTA CONTEMPORANEO” supone un carácter profesional indefinido, confuso y casi siempre incompetente y vanidoso…personajes que venden chatarra y basura como “conceptos”…
…Pero, entonces, si estos personajes son “ARTISTAS“, ¿Qué es lo que fueron Giotto, Masaccio, Piero della Francesca, Donatello, Caravaggio?
Por favor… busquemos ser decentes!
Cuentan que el pintor Edgar Degas había dicho al poeta Stéphane Mallarmé: “Tengo una espléndida idea para un poema, pero no logro escribirlo“; y entonces Mallarmé le contestó: “Mi querido Edgar, los poemas no se hacen con las ideas, se hacen con las palabras.“
A finales de 1300 Cennino Cennini escribió: “Por lo cual ustedes que vienen al Arte, adórnense antes con estas vestimenta: amor, temor, obediencia y perseverancia; y en cuanto más pronto pueden, inicien a ponerse bajo la guía del maestro para aprender; y cuanto más tarde pueden del maestro se despidan”…este es el camino que el “SISTEMA del Arte Contemporáneo” ha distorsionado y negado.
En Facebook se encuentran las más grandes verdades y las más grande estupideces… Y luego están las cosas estúpidas que reflejan verdades, como la que encontré el otro día y que dice: “Hay demasiadas personas que no tienen gana de hacer nada en la vida y se esconden detrás de la palabra” artista”, y luego los que realmente quieren trabajar no pueden encontrar un empleo!“
Con estos razonamientos me viene a la mente la profética obra maestra cinematográfica de Alberto Sordi del 1978, visitando la Bienal de Venecia, que pueden ver en YouTube: http://www.youtube.com/watch?v=OfsJAgaY62E
Y entonces, como conclusión:
¿ARTISTA? … Que Dios no lo permita!
¿ARTISTA EMERGENTE? … No me ofenda, por favor!
¿ARTISTA CONTEMPORÁNEO? … Mire que lo voy a demandar por difamación e insulto!
De una cosa estoy seguro: por favor, no me llamen “artista”. Si quieren honrarme de su reconocimiento por mi trabajo, llámeme PINTOR.
Sergio Michilini, 22 de abril 2012, Traducción del Post en ITALIANO: https://blogosfera.varesenews.it/la-bottega-del-pittore/?p=10066
Excelente artículo, Sergio. Estoy totalmente de acuerdo con lo que decís.
Concordancia y decencia, Como no estar de acuerdo se me llame como se llame, lo importante es que estoy de acuerdo con lo que aqui se dijo, por que creo en la lucha diaria por alcanzar el dominio, que no es barato. Aunque alcanzar la gloria del conocimiento pleno nunca se ha tocado a fondo, pues el que es pintor decente jamás deja de aprender y sigue buscando.
Sergio concordo….la banalità e’ diventata sistema.