En la iglesia Santo Domingo de Managua, en el barrio del mismo nombre, se encuentra una de las obras más significativas de la Historia del Arte Publico nicaragüense, y más novedosa de la Iglesia Católica en la nueva era abierta por el “Papa Bueno” Juan XXIII con el Concilio Vaticano II. Es el mural tridimensional del ábside titulado “GAUDIUM ET SPES”.
Encargado a finales de los años ‘60 por el Rev. Padre Ignacio Pinedo, fue diseñado por el pintor RODRIGO PEÑALBA y realizado plásticamente por el escultor FERNANDO SARAVIA.
Hoy en día esta obra se encuentra aparentemente en buenas condiciones con solamente algunas preocupantes grietas en el ropaje del Cristo resucitado, que necesitan de una pronta intervención por parte de restauradores profesionales.
Recientemente el amigo Fernando Guevara Rodríguez nos ha facilitado una importante entrevista al maestro Rodrigo Peñalba publicada el 16 de Marzo 1969 por La Prensa Literaria (reproducida aquí al fondo), que aclara muchos desaciertos con respecto a las valoraciones y a la iconografía de esta obra.
Iniciando por el tema del mural, que en el catálogo de Julio Valle Castillo de 1998 se define como “un mural exaltativo del catolicismo y de la iglesia católica, apostólica y romana, como institución triunfante sobre la era espacial, sobre la ciencia, las artes y la sociedad mundial y nicaragüense”, dándole como título a esta obra “EL JESUCRISTO TRIUNFANTE” (quizás como sinónimo de “La iglesia triunfante”?)
La realidad es exactamente al revés. El título original es “GAUDIUM ET SPES” y se refiere a la única constitución pastoral del Concilio Vaticano II, promulgada por el papa Pablo VI en 1965, que trata de «la Iglesia en el mundo contemporáneo»
Bien lejos de la “iglesia como institución triunfante”, este documento busca autocríticamente acercar la iglesia al ser humano, a la vida, al mundo…. la Iglesia “Debe ser más humana para ser más cristiana. El hombre es el lugar de encuentro de los hombres, de las políticas, de las religiones. Por eso la Gaudium et Spes adopta expresamente como punto de partida la condición del hombre de hoy: tal es el dato básico del documento. Si la Iglesia intenta comprender el mundo en que vivimos, sus esperanzas, sus aspiraciones, es para poder responder de una forma adaptada a cada generación, a las cuestiones eternas de los hombres sobre el sentido de la vida presente y futura y sobre sus mutuas relaciones“
Refiriéndose al mural de Rodrigo Peñalba el artículo de La Prensa Literaria dice:” Es esto un testimonio del inicio de la nueva era para el cristianismo, para la humanidad, es Cristo de nuevo resucitado: YO ESTOY CON VOSOTROS TODOS LOS DIAS” está escrito en la parte alta de la obra.
El mural se refiere claramente a CRISTO que está con nosotros, triunfante, y no la Institución de la Iglesia Católica que, más bien, debe esforzarse de entender el mundo de hoy y la humanidad de hoy, según el documento “GAUDIUM ET SPES”.
“La constitución pastoral Gaudium et Spes (1965) “contiene una nueva definición de las relaciones entre la Iglesia y el mundo, y la Teología de la Liberación era una gran aplicación de este documento de la Iglesia a la situación de América Latina” (aquí)
En varios escritos incluso se interpreta casi como un acto conservador, reaccionario y oscurantista la misma conversión al cristianismo por parte del maestro Rodrigo Peñalba, que se da supuestamente en el 1966 , incorporándose “al recién iniciado movimiento de “Cursillos de Cristiandad”, rectorado en Nicaragua por los sacerdotes Federico Arguello y los jesuitas Alvaro Oyanguren y Fernando Cardenal”
Sucede que en el 1970 “El franciscano Uriel Molina Oliú inicia una comunidad eclesial de base (CEB) en el barrio Riguero de Managua, con el objetivo de apoyar la lucha revolucionaria del FSLN….se unen a ellos algunos grupos del movimiento “Cursillos de Cristiandad” empezando así una incorporación a la Revolución. La iglesia a este punto se ve obligada a dejar el apoyo a la dictadura de Somoza y empieza el proyecto de unión al proyecto popular.”. (aquí )
Luego, casi a subrayar la perdición definitiva, la historia dice que en 1976 el maestro Rodrigo Peñalba “se incorpora al Movimiento Carismatico” (sin especificar que este fue también “originado a partir de la apertura del Concilio Vaticano II, y aceptado en 1973 como movimiento católico durante el pontificado de Pablo VI”…entonces nada de, para asi decir, “conservador y oscurantista” ).
Mucho se ha escrito en detrimento del maestro y de sus obras de Muralismo y de Arte Público. El sito web de la Stanford University, California, ( aqui ) por ejemplo, termina un escrito sobre el maestro Rodrigo Peñalba diciendo que “Sus murales son académicos, conservadores y estáticos”
Están evidentemente muy equivocados, pues nada de “académico, conservador y estático” existe en el mural de Santo Domingo, si apenas nos esforzamos de buscar, con un poco de humildad, los contenidos profundos y los mensajes auténticos de esta obra.
Y tampoco la conversión al cristianismo del maestro es algo como de equivocado en su vida, pues nos parece más bien que fue un proceso muy arraigado en la historia de Nicaragua de aquellos momentos…algo muy angustiado, comprometido, apasionado, autentico, y lleno de sed de justicia, paz, amor y lucha.
Tampoco queremos decir que el maestro se había transformado en todo un Revolucionario. No, simplemente quizás, propiamente al estudiar el “GAUDIUM ET SPES” se le había despertado aquella sed de autenticidad en la que pensaba el Comandante Tomas Borge cuando definía el .ARTE COMO HEREJIA.
Seguramente el maestro Rodrigo Peñalba se recordaba de la tremenda herejía que había vivido en Roma en el 1941 al conocerse la famosa Crucifixión de Renato Guttuso o también la otra herejía, que conoció sin duda ya estando en Nicaragua, y que posiblemente lo ayudó en su conversión al cristianismo: “La Puerta de la Muerte” de Giacomo Manzù en el mero Vaticano, inaugurada en el 1964, en el mientras que se llevaba a cabo el cambio epocal del Concilio Vaticano II
¿Que “Sus murales son académicos, conservadores y estáticos”?
El maestro Rodrigo Peñalba tenía 60 años cuando realizó el “GAUDIUM ET SPES” en la iglesia Santo Domingo en Managua. Ya había realizado pinturas murales muy “”dinámicas” y muy experimentales…y había conocido del dinamismo de medio mundo, desde los Futuristas en Europa hasta el muralismo cinematográfico de Siqueiros en nuestras américas.
¿Cómo que no podía hacer otro torbellino en Santo Domingo también?
No lo hizo, y más bien realizó allí algo totalmente en contra-corriente: una herejía total. Es como que en su plena madurez quisiera decir a los feligreses de Nicaragua:…”está bien, en lugar de un triunfo muy “dinámico” , neobarroco y neoliberal de una institución religiosa tenemos que regresar al Jesús resucitado entre nosotros, así de sencillo, en nuestros corazones, en nuestras acciones, en nuestras políticas…… que nos diga en modo claro y accesible YO ESTOY CON VOSOTROS TODOS LOS DÍAS, en el trabajo, en la familia, en las artes, en las ciencias y en todo Nicaragua”.
Y a sus alumnos de la Escuela Nacional de Artes Plásticas:….”está bien muchachos, en lugar del neo-expresionismo abstracto y de los neo-vanguardismos “dinámicos”, porque no regresamos a nuestras esculturas de Zapatera, a lo arcaico, a lo hierático, mágico….a la solemnidad y austeridad de las orígenes de las artes para encontrar nuevamente el camino de un lenguaje auténtico”.
Algo parecido a lo que sucedió en Italia y que el maestro Peñalba seguramente estudió: la revista “VALORI PLASTICI”, el “RETORNO AL ORDEN” y el grupo “NOVECENTO”, como referentes de modernidad y de renovado interés por el clasicismo y por la pintura realística, con artistas como Achille Funi o Anselmo Bucci. O las experiencias de la “5ª TRIENAL DE MILAN” (1933) con artistas como Massimo Campigli, Giorgio de Chirico y Mario Sironi, que suscribieron el “Manifiesto de la Pintura Mural” proponiendo el retorno a las técnicas tradicionales, como el fresco, el mosaico, el bajorrelieve, y el diseño vinculado a la arquitectura y a la escenografía teatral.
Pero, de todo este movimiento italiano anti-vanguardista, interesándose no por las corrientes de alabanza superficial al régimen fascista, sino que por los artistas más sinceros, audaces y profundos, como el escultor ARTURO MARTINI, que seguramente nuestro maestro Peñalba pudo conocer e apreciar, por lo menos a nivel de su impresionante obra, a partir de “El hijo pródigo” de 1927….con su etrusca estaticidad hierática, pero en potencia psicológica….. (que recuerda nuestro Cristo de Santo Domingo)
En este sentido hay algunas palabras escritas por el mismo Peñalba para presentar una escultura del Cristo de Juan Bautista Cuadra (catálogo de Julio Valle Castillo de 1998), que parecieran pronunciadas para su Cristo de Santo Domingo moldeado por el maestro Fernando Saravia: “Un Cristo grandioso en la concepción amplia de su modelación de planos…grandioso por proporción sin monumentalismo. Es necesario tener un gran sentido de independencia para salirse de las pesadas y nefastas influencias de la imaginería corriente, del rebosado, de la dulzoneria afeminada de las imágenes de aquel tiempo. Para romper con todo aquello en un medio donde no había tradiciones revolucionarias, se necesita llevar la independencia en la propia sangre. Su Cristo tiene majestad y grandiosidad y pathos”
Diego Rivera aseveró que “es importante comprender que una verdadera pintura mural es necesariamente una parte funcional de la vida del edificio“…..y en la entrevista de la Prensa Literaria del 16 de Marzo 1969 el maestro Peñalba aclara: “Ese mural ciertamente es una obra conjunta, en la cual un pintor y un escultor han unido sus mejores capacitades y su entusiasmo en la realización de una idea que sintetiza el espíritu del cristianismo antiguo, sentido en los tiempos actuales. El valioso asesoramiento de los reverendos padres Pinedo y Martínez y del Arq. Julio Cardenal, hicieron posible el éxito obtenido por Saravia y por mí en esta magna obra de la Iglesia Santo Domingo”.
Mientras acababa de terminar el Concilio Vaticano II con la constitución pastoral “Gaudium et Spes” (1965); mientras terminaba la segunda Conferencia Episcopal en Medellin (1968); mientras David Alfaro Siqueiros estaba pintando “La marcha de la humanidad en la tierra y hacia el cosmos” en el Polifórum del Hotel México (1965-1971), y en todo el mundo explotaba el entusiasmo herético y erótico del Movimiento Estudiantil del ‘68, el maestro Rodrigo Peñalba realizaba este breviario de las artes y de la espiritualidad que es el “Triunfo” de Cristo entre los nicaragüenses…. que estaban en el camino certero, “desde las catacumbas imitando a los santos” hacia el Triunfo de la Revolución Popular Sandinista el 19 de julio de 1979. Lo que esta testimoniado en otra obra inspirada tambien por la constitución pastoral “GAUDIUM ET SPES” del Concilio Vaticano II: el Conjunto Artístico-Monumental de Santa María de los Ángeles del Barrio Riguero en Managua, inaugurado en Julio de 1985.
Ambas obras, la de Santo Domingo y la de Santa María de los Ángeles representan la RESURRECCIÓN DE JESÚS EN NICARAGUA ENTRE LOS NICARAGÜENSES……
El mural de Integración Plástica “GAUDIUM ET SPES” de Rodrigo Peñalba y Fernando Saravia queda como una obra precursora de nuestro Movimiento Muralista nicaragüense y latinoamericano, y como un testimonio extremadamente significativo de la historia reciente de Nicaragua, y todo esto merecería un estudio profundo por lo menos sobre cuatro líneas de investigación que podemos resumir así, y que aconsejamos para alguna tesis universitaria o nueva publicación sobre Arte Nicaragüense:
1- El “RETORNO AL ORDEN” y el grupo “NOVECENTO” en Italia, como referente de modernidad y de renovado interés por el clasicismo y por la pintura realística.
2 – El MURALISMO MEXICANO: Arte Público, Integración Plástica y Poliangularidad por un Arte Público nacional y revolucionaria
3 – La Constitución Pastoral “GAUDIUM ET SPES”, el Concilio Vaticano II y su implementación en la realidad de América Latina y de Nicaragua.
4 – La “TEOLOGIA DE LA LIBERACION” en Nicaragua, y la participación de los cristianos al Triunfo de la Revolución Popular Sandinista
Estimados estudiantes de arte, artistas y colegas pintores, escultores y arquitectos NICARAGÜENSES: les propongo tres tesis sobre nuestro maestro RODRIGO PEÑALBA. Espero que sean de su interés y agradezco comentarios, reflexiones y aportes varios. Gracias
El proyecto de Rodrigo Peñalba
http://www3.varesenews.it/
Rodrigo Peñalba y la “Escuela Romana”
http://www3.varesenews.it/
Rodrigo Peñalba en la iglesia Santo Domingo de Managua
http://www3.varesenews.it/
Cuanta información que pocos saben, sin escribirse la historia sería otra, tergiversada a como al politico quiere o a su conveniencia, la iglesia catolica en aquellos años era durisima, pero a la vez abierta a nuevas posibilidades la estela que deja Juan XXIII es lo que hace que el Maestro Peñalba haga algo que te haga analizar hacía donde queríamos llegar en esos años. Saludos Maestro y mis respetos.
Interesante don Sergio,
Una investigación minuciosa de una obra que esta casi olvidada por muchos, colaboración de dos grandes Maestro Peñalba y Saravia.
Estaban dando su llamado casi clandestino en su altar, con sus manos y creatividad, la Teología de liberación es la que inicia una lucha Cristiana Sandinista que no me vengan con cuentos, por eso ahora quieren borrar todo aquello, porque están ensuciando la memoria histórica a través de el Arte. GRACIAS POR EL ARTÍCULO, ABRE UN POCO MÁS LOS OJOS DE NUESTRA REALIDAD.
Hola Don Sergio,
Antes de todo felicidades por estas informaciones que no se como le hace para obtenerlas, cuestión de pasión y del ser curioso, escribir no es para cualquiera y da mucha pena que siendo usted un Italiano ya radicado y nacionalizado Nicaraguense tenga que hacerles ver a muchos del INC que hay muchas obras que se desconocen, que deberían resguardar, restaurar con gente que sepa, profesionales en el campo de la restauración, sin mentiras, sin tapujos.
Gracias por llevarnos transportarnos en aquellos años, cuando existían de verdad las comunidades de base y fue cuando comienzan a surgir verdaderos jóvenes revolucionarios, cristianos y solidarios.
Gracias Maestro Peñalba donde quiera que este, gracias Maestro Saravia por continuar esta labor, y a usted por escribirla.
Estimado Maestro, si mi ojo no me falla, este Mural de los Maestro Peñalba y Saravia son una versión tímida pero igual de hermosa que la de la Iglesia Santa María de los ángeles del Barrio El Riguero de la cual los disque Revolucionarios, cristianos y solidarios se avergüenzan. Felicidades por el Artículo. Vivan los artistas por su legado, vivan siempre las comunidades de base, no estas de cuecherios, aquellas donde nacieron como milpa todos nuestros jóvenes caídos por la paz, la prosperidad e igualdad.
Sigo pasando por la piedrecitas y no he visto ningún cambio, maestro Michilini, no es por evadir el artículo,pero de que sirve que escriba, escudriñe tanta historia sino les vale verg y disculpe la palabra pero esta gente se hace de oídos sordos a los llamados del deterioro de las obras de arte publico, solo les importan los rotulos y los árboles de la vida, la memoria de los artistas como Peñalba se les recuerda en una sala en el Palacio Nacional, nada más.
Gracias!
En los años 60 inician las comunidades de base a integrarse en todos los aspectos, junto con los artistas y el Maestro Peñalba dejando un altar que daba a reflexionar a los feligreses para organizarse en la cristiandad de nuestro Jesús de Nazaret, también jugaron buen papel todos los sacerdotes de las comunidades de base, no sé porque ahora quieren tapar el sol con el dedo, si gracias a ellos hubo un triunfo, los murales del Riguero hablan de nuestra historia y es lo único que nos queda por medio del Arte, Dios mio señor intercede en la sensibilidad de la gente que esta representándonos en las instituciones.
recibido en facebook
Lucía Robelo
Tengo lindos recuerdos sobre ese mural de mi parroquia y sí, el significado era Cristo con nosotros en nuestro diario vivir, consistente con la teología de la liberación y el Credo de los Cantos a flor de Pueblo: “Creo en vos, arquitecto, ingeniero, artesano, carpintero, albañil y armador…”. Bello trabajo de Don Rodrigo. Gracias por ponerlo. El Padre Iriarte también como arquitecto contribuyó en el diseño de la Iglesia, todo se estrenó junto, el mural con la nueva iglesia.
Muy buen articulo. Soy nieto del Maestro Saravia. Si tiene algun articulo sobre Saravia me gustaria leerlo muchas gracias
Pensaba escribir un artículo sobre el Maestro Saravia. Pero tengo muy poco material. Usted o su familia tiene recortes de periódicos o articulos, catalogos o materiales del Maestro Saravia para consultar?
Por favor escríbame a este correo alexsaravia88@gmail.com y así compartimos material.
Con gusto Alex, mi email es neoarcaico@yahoo.it
Saludos Sergio Michilini
Un mural maravilloso, es una pena que no se destaque como merece y que la iglesia Santo Domingo haya quedado ubicada en una zona que ya va dejando de ser un barrio y se ha convertido en parte del mercado oriental de Managua. La frase del mural ha tenido gran significado en mi vida y gracias por este articulo que me ha parecido bastante completo e instructivo. Muchas gracias y saludos.